"Según mis propias observaciones, podría decir que se pueden hacer de las gentes dos grandes grupos: los que, por hablar con el lenguaje propio de la psicología, se identifican con los animales es decir, los que se ponen en su lugar, y los que se identifican con los seres humanos.
Creo, por mi propia experiencia y mis observaciones, que los que se identifican con los animales, los amigos profesionales de los perros y de otros animales, son capaces de mayor crueldad para con los seres humanos que quienes no se identifican espontáneamente con los animales.”
Ernest Hemingway, "Muerte en la tarde" (1932).