martes, 9 de abril de 2024

Tipos de toros según su cornamenta

Rafael Alberti: "Verte y no verte"

VERTE Y NO VERTE

Rafael Alberti

A Ignacio Sánchez Mejías

Por el mar Negro un barco

va a Rumanía.

Por caminos sin agua

va tu agonía.

Verte y no verte.

Yo, lejos navegando;

tú, por la muerte.

.................

Verónicas, faroles,

velas y alas.

Yo en el mar, cuando el viento

los apagaba.

Yo, de viaje.

Tú, dándole a la muerte

tu último traje.

....................

Mueve el aire en los barcos

que hay en Sevilla,

en lugar de banderas,

dos banderillas.

Llegando a Roma,

vi de banderillas

a las palomas.

...................

Por pies con viento y alas,

por pies salía

de las tablas Ignacio

Sánchez Mejías,

¡Quién lo pensara

que por pies un torillo

lo entablara!

..................

Una barca perdida

con un torero,

y un reloj que detiene

su minutero.

Vivas y mueras,

rotos bajo el estribo

de las barreras.

...................

Verte y no verte,

Yo, lejos navegando

tú, por la muerte.




martes, 26 de marzo de 2024

Joselito y el toreo ligado

Quiero remachar sobre algo que otros ya han explicado pero que no ha calado lo suficiento entre los aficionados al toreo y a la historia del toreo. Se trata de señalar el arranque de un fundamento del toreo moderno. Me guiaré por lo que dicen Paco Aguado y Pepe Alameda. Guerrita dejó por escrito la técnica de lo que se acabaría convirtiendo en el toreo ligado. Sus sucesores Bombita y Machaquito no pueden desarrollarlo por el tipo de toro, más voluminoso, que apareció en su época. Había que esperar a la Edad de Oro.

Joselito ve que hay que hacer algo más que pisar nuevos terrenos y dominar a cualquier tipo de toro. Recuerda la búsqueda guerrista de la prolongación del mando sobre las embestidas y él va a concretarla.

El día 3 de julio de 1914, anunciado en solitario en Madrid con toros de Martínez, en la lidia del segundo se produjo algo que pasó casi desapercibido aunque fue lo que, técnicamente, resultó más trascendente. El crítico Corrochano, sin darle demasiada importancia, lo escribió bien claro: "Joselito empieza solo, tranquilo y cerca, dando tres pases naturales completos que son muy aplaudidos". A esto Pepe Alameda años más tarde lo calificaría como el eslabón entre Guerrita y el toreo moderno.

Alameda sabía que ese intento de toreo en redondo no era aportación de Belmonte y buscó su origen. Así, encontró la película del 3 de julio y vio "los tres pases naturales completos", que además Joselito ya había ejecutado de vez en cuando con anterioridad. Ayudado con la espada, en vez de expulsar la embestida como habitualmente, la recoge y la sujeta; no la deja y espera la siguiente sino que, girando, obliga al toro a volver.

Joselito ha descubierto que los pases de muleta, como las verónicas, pueden enlazarse. Comprueba que, cargando la suerte, el final de un pase puede ser el inicio de otro si se hace doblar hacia dentro al animal.

En aquella primitiva serie ligada no había gran estética pero estaba experimentando un mecanismo técnico objetivo que podía repetirse en manos de otros toreros. No es una cuestión estilística subjetiva sino un recurso técnico de dimensión definitiva, pues abría "un cauce histórico", en palabras de Alameda.

Es verdad que aquel intento de toreo ligado tenía tímidos precedentes. Cayetano Sanz, en la mitad del siglo XIX, ya había esbozado algo parecido pero no tuvo ningún imitador. A finales de ese siglo Fernando el Gallo (padre de Joselito) lo logró alguna vez y también Vicente Pastor.

Joselito no se conforma con ligar los naturales en alguna corrida concreta sino que lo intenta con todo animal que se preste medianamente, convirtiendo esta aportación técnica en la pieza fundamental de sus faenas y en la base de su tauromaquia total.

Sólo le faltaba perfeccionar y esto culminó el año 1917 en Barcelona, ante un saltillo, cuando, según el crítico Don Quijote, "enloqueció al público con tres naturales en redondo, tan prodigiosos que no puede pedirse más".

Joselito ganó en verticalidad, en plástica y en temple (asimilado de Belmonte) y dejó la ligazón preparada para que Chicuelo la llevara a extremos definitivos, con cuatro o cinco series de naturales ligados ante el toro Corchaíto de Graciliano, en Madrid el año 1928.

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sábado, 16 de marzo de 2024

Asomarse al balcón

¿Queréis saber qué es asomarse al balcón?

El banderillero José Chacón os lo explica en esta imagen.

Foto: André Viard.

martes, 12 de marzo de 2024

Estoquear por arriba

Toros Obeid

El toro en la protohistoria: veamos estas dos estatuillas esquemáticas en arcilla, halladas en Tell Uqair (Irak).

Pertenecen culturalmente al período de El Obeid (5000-3500 aC.), en el que el culto al toro fue predominante. Las estatuillas pudieron utilizarse como exvotos.

Se conservan en el Museo Arqueológico Nacional (Madrid).

sábado, 9 de marzo de 2024

Los iberos y el toro

Una muestra más de la devoción de los iberos por la figura del toro la encontramos en el yacimiento arqueológico de la llamada precisamente necrópolis del Toro, que está en Alcubillas (Ciudad Real) y se fecha en el siglo V aC.

Allí aparecieron fragmentos de estatuas de animales como felinos y el toro que le da nombre. Se supone que la estatua del toro coronaba un monumento funerario.

El toro, por ser animal fiero, se ponía en las tumbas como guardián, al igual que un león o un lobo. Indicaba que si alguien profanaba la tumba sufriría las consecuencias del ataque de dicho guardián.

miércoles, 14 de febrero de 2024

El toreo mejicano en el siglo XX

En México hay numerosos personajes taurinos pero intentemos una síntesis aproximada de su Tauromaquia.

El todavía toreo mexicano del siglo XIX se cierra con el fallecimiento del polifacético Ponciano Diaz en el año 1897. Polifacético porque toreaba a pie y a caballo, hizo de empresario, fue descubridor y mecenas de toreros mexicanos y fue protector de toreros españoles. Sus características más sobresalientes eran su gallardía y sus conocimientos del ganado bravo al haber nacido en una hacienda con reses de lidia. Es verdad que estuvo lejos de la categoría de los lidiadores españoles en cualquiera de las facetas que experimentó. A mi entender su actividad y trayectoria se asemeja más a la del también polifacético y contemporáneo suyo José Bayard y Cortés Badila, picador español, que de vez en cuando rejoneaba, toreaba a pie y llegó a cantar zarzuelas. El célebre Badila había venido al mundo en Tarragona y era hijo de padre francés y madre catalana. Los dos nacieron en 1858 y murieron jóvenes, a los 39 y 48 años respectivamente.

En 1907, viene de México, con 22 años, un torero peculiar: Vicente Segura. En España, su carácter, su persona y su fortuna tuvieron buena acogida en las novilladas en que participó. Confirmó la alternativa el 6/6/1907 en Madrid con Fuentes y Bombita y toros de Moreno Santamaría. Fue empresario de la Plaza El Toreo y tuvo alguna reaparición fugaz. Su característica principal era el valor. Sus discípulos más inmediatos son Luis Freg y Juan Silveti.

Pero antes nos visita Rodolfo Gaona y Jiménez. Gaona nace en León de las Aldabas en 1888. Es casi un niño cuando el banderillero español Saturnino Frutos Ojitos crea una escuela taurina en dicha localidad. Ojitos lo presenta de becerrista en la plaza de México en 1905. Llega a España en febrero de 1908 acompañado de Ojitos como mentor y apoderado. En Tetuán de las Victorias toma la alternativa el 31/5/1908, actuando de padrino y testigo Manuel Lara Jerezano con toros de Peñalver. La actuación del torero mexicano es un éxito que repite con cuatro toros el 28 de junio como único espada. Confirma la alternativa el 5 de julio de manos de Juan Sal Saleri y Tomás Alarcón Mazzantinito con reses de Juan González Nandín. Crece con la llegada del apolíneo Joselito y del dionisiaco Belmonte. Solo Gaona y Rafael El Gallo mantienen su cotización ante los dos colosos. Es el máximo impulsor de la torería clásica mejicana y abre las puertas a las posibilidades de otros países taurinos que irán aportando figuras a escalafones más cosmopolitas. Es también la primerísima figura del toreo no nacida en España y enriquece el repertorio de capote al inventar la gaonera. La llamada Fiesta Nacional, afortunadamente, pasa a ser casi multinacional. 

Los hermanos Freg son los primeros en seguir la estela de Gaona. El más destacado es Luis. Toma la alternativa el 26/10/1910 en El Toreo de manos de Lagartijillo Chico con toros de Piedras Negras. En la confirmación en Madrid el 24/9/1911 no estuvo bien al resentirse de una cogida, pero en su país lo solicitan las empresas. Vuelve a España. Los muchos percances demuestran las carencias de Luis. Hace el paseíllo entre 25 y 40 tardes durante quince temporadas. Murió a los 46 años al accidentarse el barco en el que viajaba. 

Juan Silveti toma la alternativa en Barcelona el 12/6/1916 de manos de Luis Freg. El 17/6/1917 la confirma de manos de Rafael El Gallo, con Cocherito de Bilbao y Pacomio Peribáñez de testigos. Torero de valor extremo que torea mucho más en México que en los ruedos españoles pero es el primer torero foráneo que inicia una dinastía de toreros.

Nueve años después comienza la edad de oro del toreo mejicano con tres espadas fundamentales en la línea de Gaona. Pepe Ortiz, con alternativa en 1925, es un torero alegre y vistoso, creador de la «orticina», que además interpreta varias películas de temática taurina.

En 1927 toma la alternativa Fermín Espinosa Armillita, considerado el mejor torero mexicano de todos los tiempos.

Es un lidiador completo que llega a encabezar el escalafón español en 1935. Era el Joselito mexicano. Los convenios taurinos hispano-mexicanos paralizan mucho su presencia en España. 

Jesús Solórzano toma la alternativa el 15/12/1929 de manos de Félix Rodríguez. Torero de inspiración, gusto y calidad pero de escasa regularidad. La inventiva de Ortiz, la maestría de Armillita y la inspiración de Solórzano son decisivas en la evolución del toreo de Gaona y del toreo mexicano.

Se les unen en los años treinta Alberto Balderas y David Liceaga. Lorenzo Garza y Luis Castro El Soldado toman parte en varias novilladas en Madrid que los lanzan a figuras indiscutibles. También coinciden en el tiempo Heriberto García, Fermín Rivera, El Calesero y los hermanos Pérez: Carmelo y Silverio. 

Carmelo apunta hacia la mano muy baja y la despaciosidad, pero muere a los 23 años de una cornada mal controlada; su hermano Silverio, el gran Silverio Pérez, «el de la muleta perezosa», poco después consigue el sueño de Carmelo. Es el torero más querido del pueblo mexicano. 

El 11/6/1903 nace Sydney Franklin en Nueva York. Visita México, presencia una corrida y se le despierta la afición. Torea novilladas por ruedos españoles. Toma su alternativa a los 42 años en Madrid el 18/7/1945 de manos de El Estudiante y Morenito de Talavera de testigo, con toros de Sánchez Fabrés. En Estados Unidos da conferencias, firma películas y documentales divulgando la Tauromaquia y se hace amigo de Hemingway. Potencia el interés tauromáquico en Hollywood. Varias figuras del toreo azteca alternan en ruedos y en pantallas. James Dean llega a plantearse ser torero profesional. Para el actor, el capote que le regaló Sydney Franklin era una reliquia.

Mientras la posguerra española, en México siguen arriba casi todos los toreros de su mejor época con un toro casi ideal. Se van incorporando Arruza, de padres españoles, Cañitas, Antonio Velázquez, Manuel Capetillo, Jesús Córdoba, nacido en Estados Unidos, o Luis Procuna, protagonista de “Torero”, una de las mejores películas taurinas. Los miedos del imprevisible Luis Procuna le hacen torear mucho por alto, pero a los pases aéreos le imprime una cadencia y mando desconocidos.

De todos ellos, en España sólo Arruza se encumbra y aguanta el tirón de las figuras españolas. A figuras de los años cuarenta se incorporan nombres sonoros en los años 50. Jaime Bravo, Joselito Huerta, El Ranchero, Alfredo Leal y los primeros toreros de dinastía como el nuevo Juan Silveti o Anselmo Liceaga. La evolución de los escalafones mexicanos va siendo casi paralela a los escalafones españoles. Joaquín Bernadó, que toma la alternativa el 4/3/1956, es el lidiador que más veces hizo el paseíllo en ruedos mexicanos en todo el siglo XX.

En toman la alternativa dos de los toreros aztecas más emblemáticos: Eloy Cavazos y Manolo Martínez. Cavazos, en la línea festiva y colorista de su paisano Pepe Ortiz, es uno de los tres o cuatro toreros que han participado en más corridas a lo largo de sus 45 temporadas como matador de toros en activo.

Manolo Martínez hace el toreo más españolizado, tal vez por el asesoramiento de Pepe Alameda, exiliado en México y cuñado de Domingo Ortega. Los dos tienen cartel en España pero coinciden con Camino, El Viti y El Cordobés o Rafael de Paula.

A partir de los años 70 se nutren los escalafones superiores de México y España con toreros de dinastía como Curro Rivera o Manolo Arruza. Con renovados e interesantes Armillitas, Silvetis, Leales, Liceagas o Solórzanos.

También hay figuras sin esos antecedentes dinásticos como Mariano Ramos, Antonio Lomelín, Jorge Gutiérrez, Manolo Mejía o Zotoluco, que complementan los carteles más atractivos…, pero a distancia de los mejores momentos de ambas orillas atlánticas.

sábado, 20 de enero de 2024

Fotos taurinas de Lucien Roisin

Voy a poner una cuantas fotos taurinas de Lucien Roisin, postalista francés afincado en España desde 1912 hasta 1943. Pertenecen a dos series conservadas en la Biblioteca Nacional de España. Vamos con a primera, "Valencia II en un pase de rodillas":

La segunda es "Media verónica de Pablo Lalanda".

Tercera foto: "Banderillas de Gallito". El escenario es la Monumental de Sevilla, plaza cuya construcción tanto alentó Joselito.

Cuarta foto: "Molinete de Chicuelo".

Quinta foto: "Un adorno de Belmonte".

Sexta foto de la serie de Lucien Roisin: "Belmonte después de una estocada". Es la última que pongo de la primera serie.

Veamos ahora la segunda serie de fotos taurinas de Lucien Roisin depositadas en la Biblioteca Nacional de España: "Una verónica de Gitanilllo de Triana".

Va la segunda foto de la segunda serie: "Bienvenida en un par de banderillas". No se trata de Antonio Bienvenida sino de su padre, el Papa Negro.

Tercera foto: "Pase de rodillas de Algabeño".

Cuarta foto: "Pase de pecho de Cagancho".

Aquí va la última foto que de Lucien Roisin voy a publicar: "Pase afarolado de Belmonte".

Las fotos taurinas de este postalista francés que hay en la Biblioteca Nacional de España son en total veintiuna; catorce en la primera serie y siete en la segunda. He publicado aquí sólo las que se refieren a toreros de nombre conocido pues las demás se refieren a toreros sin identificar. Sin embargo, hay que advertir que Roisin no era fotógrafo taurino. Vivió en Barcelona, donde regentó una tienda-taller de postales de temática variada.

martes, 16 de enero de 2024

Plaza de toros de Villaluenga del Rosario

Plaza torera,

placita pueblerina,

yedra y solera.


Mulerito, Contreras

o El Gastoreño

sueñan con Jesulines

de oro y sueño.


¿Verdad, Galloso?

¡Qué faena tan grande,

qué chico el coso!


Piedra y recuerdo,

esta plaza de toros

donde me pierdo.


Piedra y olvido,

esta plaza con nombre

y con apellido.


Plaza de piedra,

la placita serrana

de Villaluenga.


𝐴𝑛𝑡𝑜𝑛𝑖𝑜 𝑀𝑢𝑟𝑐𝑖𝑎𝑛𝑜



domingo, 14 de enero de 2024

Picasso 13: Alguacilillo

Alguacilillo.


 

Picasso regaló a José Bergamín este dibujo a tinta china para que lo incorporara a su libro "El arte de birlibirloque".

sábado, 13 de enero de 2024

¿Quién inventó la media verónica?

Muchos dicen por ahí (y los he escuchado personalmente) que el pase de “media verónica” fue inventado por Juan Belmonte, al que se le atribuye una respuesta de las habituales en él. “Maestro, ¿usted por qué hace una media verónica?” “Porque una media mía vale más que una entera de los demás”. 

No me voy a poner ahora a negar que Belmonte consolidó la media. Sin embargo, José Antonio del Moral, en su libro “Cómo ver una corrida de toros”, hablando de la media verónica no dice quién la inventó pero Fernando Fernández Román, en “Toros contados con sencillez”, sí dice que la inventó Juan Belmonte.

Ahora podemos ver la prueba de que Belmonte no inventó la media verónica. Es una litografía de La Lidia, con fecha de 11 de septiembre de 1899, en la que se ve una ejecución de la media verónica y por si hubiera dudas el título de la imagen lo dice claramente: “Un quite con media verónica”. En 1899 Juan Belmonte tenía siete años.



jueves, 4 de enero de 2024

Benito Pérez Galdós

El novelista Benito Pérez Galdós dijo: "Subsistirán, pues, las corridas de toros mientras exista en el alma española esta apreciación del color y esta propensión a la alegría... Se puede decir que el día que no haya toros, los españoles tendrán que inventarlos".