martes, 5 de enero de 2016

Plaza de la Herrería en El Puerto



En El Puerto de Santa María hay un popular plaza cuya denominación arranca de la herrería que Juan Ruíz tenía establecida en el siglo XVI, haciendo esquina con la calle Misericordia. Con los años se arregló, llegando a acoger festejos públicos. Las corridas de toros se trasladaron desde la Plaza del Polvorista hasta aquí en el siglo XVIII y duraron hasta 1769, año en que se construyó en el ejido de San Francisco la primera plaza de toros con que contó la ciudad.



En uno de sus frentes se encuentra la Casa de los Diezmos, donde, desde el siglo XVII al XIX, se almacenaba la décima parte de la producción agrícola y ganadera que la sociedad civil reservaba para la manutención de la Iglesia. Sobre la portada se conserva una representación de la Giralda y dos azucenas, símbolo de la diócesis de Sevilla, de la que dependía el priorato portuense.



De Manuel Martínez Alfonso sacamos un texto que dice:«Nos consta que en 1746 ya hacía varios años que venían celebrándose corridas en la Plaza de la Herrería. Lo sabemos por un pleito que surgió a cuenta de los andamios de la nueva plaza. El archivero municipal Juan Cárdenas nos habla de esta Plaza, donde ya en 1744 se celebraban corridas de toros, Plaza “que habilitaban con andamiajes, donde afluían espectadores de todos los pueblos inmediatos, proporcionando pingües ganancias a las empresas’.



Pero la referencia documental que nos confirma la existencia de esta Plaza es el expediente promovido por el Convento de Padres Agustinos de esta ciudad, con motivo de “haberse formados andamios con perjuicio de unas casas de sus propiedad en la Plaza de la Herrería”. Al parecer, y con motivo de las fiestas por la subida al trono del rey Don Fernando VI, los Caballeros Diputados de la Ciudad determinaron celebrar varios días de toros, y para ello eligieron la Plaza de la Herrería, “en el sitio donde siempre se había acostumbrado”, según frase literal de uno de los documentos, lo que viene a confirmar la existencia de una tradición firmemente enraizada.



Esta plaza sirvió en varias ocasiones al pintor portuense Juan Lara para inspirarse y recoger sobre sobre ellas tipos y escenas, entre las que no faltaban el mercado de caballos, la hora de la corrida o el juego de niños toreando de salón.



Esta información se ha elaborado a base de la web gentedelpuerto.com









.









.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

No se permitirán comentarios ofensivos, de mal gusto o que falten a la verdad.